Hoy, al salir de casa, hacía un sol espléndido. Toda confiada, al llegar, cogí el coche para ir a ver a Óskar. Abrí la cochera, y estaba chispeando un poco. "Bueno, nada que no pueda aguantar". Lo malo fue cuando empecé a dejar de poder ver la carretera por lo mucho que llovía, lo jodido que era aparcar cerca de casa de Óskar, el agua que empezaba a entrar en el coche, y lo inundadas que estaban las putas calles.
Afrontémoslo. Hay días de lluvia que MOLAN y otros que NO MOLAN.
3 comentarios:
esto es una mierda pero los dibus molan sobre todo el de bob esponga
tuu lo k eres es gilipoyasss
¡Viva! Anónimo número 2, ¡eres el primer retrasado en comentar en mi blog! Puedes recoger tu pin del Fary en cualquier edificio de salud mental.
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